Desde que apareció en el horizonte la posibilidad de un autoconsumo eléctrico, han sido muchos los hogares que se han lanzado por esta nueva apuesta. Tanto es así que nuestro país se sitúa en el tercer puesto del ranking de principales mercados solares de la UE, según datos que maneja Solar Power Europe.
¡Descubre todas las claves del autoconsumo eléctrico en el siguiente artículo!
Índice de contenidos
¿Qué es el autoconsumo eléctrico?
El autoconsumo eléctrico consiste en un sistema de producción energética que permite generar electricidad a través de paneles solares o generadores mini eólicos.
Concretamente, la Ley del Sector Eléctrico de España señala que el autoconsumo eléctrico es “el consumo de energía eléctrica procedente de instalaciones de generación conectadas en el interior de una red de un consumidor o a través de una línea directa de energía eléctrica asociada a un consumidor”.
Autoconsumo fotovoltaico
Como hemos dicho anteriormente, el autoconsumo eléctrico puede proceder de paneles fotovoltaicos. Esta modalidad requiere de su instalación para aprovechar la radiación solar y producir electricidad.
El autoconsumo permite producir energía para generar electricidad a través de paneles solares o generadores mini eólicos
Un sistema de autoconsumo fotovoltaico estará formado por panel solar, regulador, acumular e inversor.
Autoconsumo mini eólico
Por su parte, el autoconsumo mini eólico aprovecha la fuerza del viento -también conocida como energía cinética- para producir electricidad. Se necesita un aerogenerador de pequeño tamaño para ello.
En este caso, se haría necesario la instalación de un aerogenerador, un regulador y un acumulador.
Beneficios del autoconsumo energético
Las ventajas del autoconsumo eléctrico son diversas, aunque en este artículo solo remarcaremos las más importantes como:
Sostenibilidad
Con el autoconsumo eléctrico, se utiliza una energía limpia, renovable e inagotable que contribuye a evitar las emisiones a la atmósfera.
Fácil amortización de la inversión
Como te podrás imaginar, instalar un sistema de autoconsumo eléctrico puede suponer, en un primer momento, una inversión. No obstante, se recupera en un plazo medio-largo de tiempo (10 años, aproximadamente).
Ahorro
Como hemos afirmado en el epígrafe anterior, una instalación eléctrica puede suponer a los consumidores un gran ahorro, hasta del 50% en la factura de la luz, a pesar de la inversión de la instalación inicial.
Beneficio fiscal
Existen ayudas económicas de nivel estatal y regional para facilitar la instalación e incentivar este tipo de energía verde.
Tipos de instalaciones para autoconsumo eléctrico
En este artículo sobre el autoconsumo, también vamos a descubrir qué tipos de instalaciones existen y cómo se diferencian entre ellas.
Instalaciones de autoconsumo eléctrico conectadas a la red
Este tipo de instalaciones eléctricas están ideadas para cubrir una parte de la consumición eléctrica y reducir ese importe de energía en la medida de lo posible.
Autoconsumo directo
Son aquellas instalaciones en las que el usuario consume la energía generada por su instalación. A su vez, la energía fotovoltaica que no sea utilizada, se vierte directamente a la red -mediante compensación por ello, si la instalación reúne los requisitos-.
En el supuesto de necesitar más energía, se añadiría también de la propia red.
Autoconsumo con baterías o sistema de acumulación
En esta modalidad de autoconsumo eléctrico, sería similar a la anterior solo que, en vez de verter a la red la energía no consumida, sería almacenada en baterías para futuras necesidades.
Instalaciones de autoconsumo aisladas
En este caso, las instalaciones eléctricas no están conectadas a la red general y se haría necesario almacenarla en baterías externas para un suministro de 24 horas.
En definitiva, apostar por el autoconsumo eléctrico es hacerlo por una alternativa eléctrica que, a su vez, consigue una mayor sostenibilidad en el planeta y una gran eficiencia energética.
